Adiós a la Ilustración
La llamada Ley Celaá culmina un proyecto pedagógico que hace de la autoestima del alumno el centro de gravedad del proceso educativo. Desde su nombramiento como Ministra, Celaá hizo bandera del lema “El peor castigo [para el alumno] es la rebaja de la autoestima”. Y agarrados a esa bandera hemos llegado a la aprobación de una ley educativa en función de la cual la obtención del título de Bachillerato “no quedará supeditada a la no existencia de materias sin superar”. A saber, a la aprobación de