Denuncian “irregularidades” en 8 de las 19 provincias en las que Vox celebra primarias y anulan las de Alicante, Jaén y Málaga
Vox ha cerrado el proceso de votación de sus primarias con denuncias por “irregularidades” en al menos ocho provincias. El partido liderado por Santiago Abascal inicia ahora la fase de impugnaciones, que coincidirá en principio con el esperado anuncio de la moción de censura a Pedro Sánchez, y dará a conocer los resultados finales de las primarias el próximo 4 de octubre.
El Comité Electoral de Vox ha acordado “anular parcialmente” el proceso electoral y proceder a su repetición en Alicante, Jaén y Málaga “tras haber constatado la existencia infracciones de normas internas que han enturbiado el proceso electoral”.
De este modo, las candidaturas que obtuvieron los avales suficientes para presentarse, que lograron un 10% de afiliados de pleno derecho, tendrán que volver a realizar la campaña electoral y se repetirán las votaciones, para lo que se fijará nuevo calendario.
Las primarias de la formación, que se han celebrado en 19 provincias aunque solo se ha llegado a la fase de votación en siete de ellas, tenían el objetivo de organizar estructuralmente a Vox a nivel regional, ya que en prácticamente todas las delegaciones el partido estaba encabezado por una gestora.
No obstante, a lo largo de esta semana se ha denunciado “numerosas irregularidades” de manera interna ante el Comité Electoral. Así, se han presentado, entre otros lugares, recursos sobre las primarias en Barcelona, Valencia, Sevilla, Murcia, Toledo, Asturias, Alicante y Granada.
Recursos no permitidos
En la mayoría de situaciones se plantea que la candidatura “oficialista” (la procedente de la gestora) ha aprovechado recursos no permitidos en la normativa electoral para promocionar sus campañas y candidatos, lo que genera un desequilibrio a ojos del sector crítico del partido.
Se trata, tal y como queda recogido en un documento de impugnación presentado de manera conjunta ante el Comité Electoral, de acusaciones de, entre otras, “incompatibilidades”, “presiones, intimidaciones y amenazas”, “intento de fraude electoral” o “financiación ilegal de la candidatura impugnada”. El recurso, al que ha tenido acceso EL MUNDO, termina solicitando la nulidad del proceso electoral y reclamando la “apertura de expediente disciplinario a los cabezas de lista de las candidaturas infractoras”.
“Se juega en inferioridad”, explica a este diario una fuente de la corriente crítica de Vox al preguntarle por las conocidas como candidaturas “no oficialistas”. Según cuenta, “los plazos han sido muy cortos” y “no ha habido la suficiente transparencia” a la hora de acceder a los censos, lo cual ha generado un desequilibrio entre aspirantes.
Desde la dirección del partido se ha informado de que “casi todos” los recursos han sido contestados ya por el Comité Electoral y han evitado valoraciones sobre los mismos. Sí que se ha apuntado que cuando ha habido que sancionar alguna de las candidaturas oficialistas “se ha hecho” y siempre “tomando las medidas del Reglamento interno de Procedimientos Electorales, que son muy claras al respecto”.