Esquerra Republicana no va a dar su brazo a torcer y mantiene la presión sobre los Presupuestos Generales del Estado en el Senado como arma propicia para forzar al Gobierno a admitir sus demandas en relación con la producción en catalán en las grandes plataformas audiovisuales.
ERC admite que las negociaciones con el Gobierno siguen abiertas y aunque en las mismas se ha registrado “algún avance” todavía no hay un acuerdo que les satisfaga. “El voto de ERC hay que sudarlo”, ha dicho en referencia a los Presupuestos y a otras iniciativas gubernamentales como la ley de Memoria Histórica o la ley de Residuos.
El portavoz parlamentario de los republicanos catalanes, Gabriel Rufián, insiste en que sus peticiones respecto a la ley Audiovisual son de la máxima trascendencia para Cataluña y para la preservación e impulso de la lengua catalana y en ese sentido, lamenta estar “negociando en soledad”.
Así ha reprochado al PSC que, en este caso, “esté desaparecido” y a Junts que no utilice las “bazas importantes” que tiene en su mano para forzar al Gobierno central. Rufián ha urgido a la otra formación independentista catalana a amenazar al Ejecutivo con romper el pacto que mantiene con los socialistas en la Diputación de Barcelona y aceptar en su lugar un acuerdo con Esquerra. “Los votos dan”, ha asegurado, “y sería una gran palanca” para empujar al Gobierno.
Rufián ha explicado, además, que, en su estrategia de presión, se encuentran ahora centrados en la negociación de las enmiendas a los Presupuestos en el Senado donde, además de defender el paquete que ellos mismos han presentado, no descartan apoyar otras de diferentes grupos parlamentarios, en concreto, la firmada por el PP reclamando la rebaja del IVA a las peluquerías. De aprobarse en la Cámara Alta alguna enmienda, el proyecto de Cuentas Públicas debería regresar al Congreso para que las modificaciones se debatieran y votaran lo que retrasaría la entrada en vigor del Presupuesto.
Por su parte, desde el Grupo Socialista, su portavoz en el Congreso, Héctor Gómez, insiste en que se sigue trabajando con ERC “con discreción” y con el objetivo de que los Presupuestos del Estado se aprueben definitivamente y entren en vigor cuanto antes y sin modificaciones impuestas en el Senado que obliguen la vuelta del proyecto al Congreso.