El incendio declarado este sábado en Bera (Navarra) y que tras estar fuera de control obligó a desalojar un total de 38 caseríos del barrio Bidasoa de Irún se encuentra estabilizado y las viviendas no corren peligro. De este modo, la carretera N-121A y GI-3455 se encuentran abiertas al tráfico en ambos sentidos.
Efectivos de bomberos trabajan desde ayer en la extinción del fuego declarado en Bera, cerca de la frontera con Francia, que llegó a estar fuera de control debido al fuerte viento.
La portavoz de la Diputación de Guipúzcoa, Eider Mendoza, ha señalado esta mañana que la situación es “estable” aunque sigue siendo “crítica” en la zona de Endarlatsa.
Sobre el terrero continúan trabajando efectivos de Cruz Roja, Dya, personal de bomberos, guardas forestales, Ertzaintza, así como Protección Civil.
Según cálculos aproximados, el incendio habría quemado ya una superficie de unas 1.600 hectáreas.