El próximo fin de semana decae en España el estado de alarma, el paraguas legislativo del que se ha valido el Gobierno para regular derechos fundamentales durante la pandemia. Publicado el pasado 25 de octubre, el estado de alarma regula, además de la posibilidad de ordenar cierres de locales comerciales o de hostelería, la movilidad entre provincias o zonas básicas de salud y el toque de queda nocturno.

El Real Decreto 956/2020 ha sido la base para que las comunidades autónomas pudieran desarrollar sus planes de contención de la pandemia sin la oposición de ningún tribunal. A partir de las 00.00 horas del domingo serán los Tribunales Superiores de Justicia, y en última instancia el Tribunal Supremo, los encargados de velar por la legalidad de las normas que imponga cada región.

A pocos días de que decaiga el estado de alarma, aún no todas las comunidades autónomas tienen claro qué restricciones se mantendrán, y cuáles no. Y surge una paradoja la noche del sábado: la hora fantasma.

El estado de alarma establecía un toque de queda nocturno a las 23.00 horas, que las comunidades podían desviar una hora en función de su situación sanitaria. Según establece el Real Decreto, el estado de alarma finalizará a las 00:00 horas del día 9 de mayo, lo que significa que el sábado sí seguirá vigente, no así el domingo.

La paradoja estriba en que la circulación de personas en horario nocturno estará, esa noche, limitada sólo una hora. A las 23.00 horas habrá que volver a casa, pero se podrá volver a salir una hora después, a medianoche.