Las CCAA planean ya sus propias desescaladas tras la rectificación de Sanidad

El fracaso de las nuevas restricciones obligatorias del Ministerio de Sanidad para la hostelería y el ocio nocturno les ha cambiado el paso a los gobiernos autonómicos. Tras conceder la Audiencia Nacionalmedidas cautelarísimas a la Comunidad de Madrid ante lo que Isabel Díaz Ayuso consideraba una «invasión de competencias», la ministra del ramo, Carolina Darias, tuvo que dar marcha atrás. Entonces, telefoneó a los consejeros para anunciarles que buscaría consensuar otro documento con «recomendaciones» y no medidas de obligado cumplimiento. Ninguna región tendrá que cerrar ahora el interior de los bares, por ejemplo.

El documento que ha decaído consideraba obligatorias las medidas para la hostelería hasta que se alcanzasen «coberturas de vacunación de al menos el 70% de la población con pauta completa». Esto ocurrirá el 18 de agosto, según Pedro Sánchez. Pero ahora las medidas para la hostelería serán sólo recomendaciones, de manera que tampoco se tendrán que mantener forzosamente hasta una fecha en la que la suerte de la temporada turística ya estaría echada.

Así que ahora las autonomías tendrán, en suma, manos libres para ir desescalando sus restricciones a la hostelería en función de cómo avance la vacunación y de la incidencia que acumulen. Y al menos siete de las comunidades consultadas piensa hacerlo. Se trata de Castilla-La Mancha, Aragón, Extremadura, Andalucía, Madrid, Murcia, Castilla y León.

En el gobierno de esta última autonomía explican su posición así: «Lo estamos haciendo ya, y seguiremos desescalando en función de la evolución epidemiológica y sanitaria, que está a la baja». Alfonso Fernández Mañueco ha liberalizado «el horario de las terrazas, que sólo deben adaptarse a lo que marque la normativa municipal» y ha aumentado de seis a 10 las personas por mesa.

En el ejecutivo de Castilla-La Mancha son claros: «Sin duda» seguirán relajando ahora las medidas más allá de lo que quería Sanidad, «como venimos haciendo desde nuestro decreto del 8 de mayo». En la Comunidad de Madrid opinan igual: «Seguiremos la estrategia que venimos desarrollando. Vamos actualizando cada semana las medidas en función de la evolución epidemiológica». En el equipo de Isabel Díaz Ayuso enfatizan que el «intento de imposición» de Carolina Darias «desenmascara que la cogobernanza no es tal».

La Región de Murcia tiene su propio documento técnico, que, junto a la evolución de la pandemia, guiará «como hasta ahora todos los pasos que se den en cuanto a la desescalada», apuntan en el entorno de Fernando López Miras. «Lo que no tiene sentido es que el mismo Gobierno central que se ha desentendido de la pandemia ahora pretenda imponer sus propios criterios y una hoja de ruta que no ha sido ni consultada ni consensuada. Están generan el caos».

En la Junta de Extremadura creen que «es lógico que las restricciones se adapten a la evolución de la pandemia» y se vayan relajando al ritmo que marque «el Consejo de Gobierno», que es el que tiene la «competencia». Y no el Ministerio. En la misma onda está el gobierno de Aragón: «Trabajamos con la ley autonómica 3/2020, que es de rango superior a las recomendaciones del Ministerio». Esa norma «nos permite hacer modulaciones y flexibilizar algunas medidas en las que ya se trabaja».