“Sólo el que está ciego se va con serenidad al precipicio”. Y “para quien ama la lisonja, es enemigo quien no es adulador”. Son dos frases que retumban hoy en Génova, pero por un motivo muy distinto al que se podría esperar. No son citas célebres de Maquiavelo, ni de Plutarco ni de Churchill. Son los dos únicos tuits de la cuenta @Feijoo, dedicada a la memoria del padre Benito Jerónimo Feijoo (1676-1764), una de las figuras más destacadas de la primera ilustración española, y administrada por el Monasterio de San Julián de Samos.
¿Y? ¿Qué importan los tuits de una congregación lucense que mientras se escribe esta noticia cuenta con 24 seguidores y no tiene actividad? Pues poco, pero simbólico: esta cuenta bloquea que el nuevo presidente nacional del PP, Alberto Núñez Feijóo, cambie su perfil institucional de @feijoogalicia a @feijoo, toda vez que ya ha anunciado su adiós a la Xunta.
En su lugar, y ante la imposibilidad de acortar su cuenta sólo a su segundo apellido, el líder de la oposición ha optado por @nunezfeijoo. Este viernes ha sido el primer día en el que ha dejado de estar activa su anterior dirección. Feijóo desechó la posibilidad de @FeijooPP porque quiere “trascender” las siglas de su partido, como ya demostró al enviar su documento económico al Gobierno con el escudo nacional en vez del logo de su formación.
Hay que recordar que en las elecciones gallegas Feijóo orilló ya las siglas del PP en favor de la palabra Galicia, justo como venía haciendo en Twitter. Pero tampoco ha elegido @FeijooEspana al estar igualmente ocupado ese perfil. Se trata de una cuenta que se reconoce “fake”. Por otro lado, en el equipo del presidente del PP eran conscientes de que no podía mantener @FeijooGalicia si quiere ampliar el foco con La Moncloa en la mirilla.
El padre prior de la Abadía de Samos asegura que su monasterio es un lugar “santo” y “mágico”. Con 1.500 años de vida monástica casi sin interrupción, alberga este monasterio “la historia de muchos pueblos y hombres que pasaron por él: (los antiguos suevos le dieron el nombre: sámanos, lugar de monjes) y que siguen pasando, pues es Camino de Santiago”, añade.
“El ilustre hijo de Samos, Padre Feijoo, describe así la topografía del lugar: Tan recogido, tan estrecho, tan sepultado está ese monasterio entre cuatro elevados montes, que por todas partes no sólo le cierran, mas le oprimen, que sólo es visto de las estrellas (…) Sólo hacia el Cielo tiene la vista desahogo; y así se lleva todas las atenciones el Cielo”.
Nada de esto lo comparten los monjes en Twitter, ni siquiera las imponentes imágenes del lugar que cuelgan de la web de la Abadía. Pero la cuenta ahí se mantiene, impertérrita y encajonada, como el monasterio.