Ernest Renan, célebre pensador francés del siglo XIX, definió la nación como un plebiscito diario refiriéndose de ese modo a la argamasa que representa la voluntad de cada pueblo por convivir unido y compartir un sentimiento cívico. Esa teoría de Renan es perfectamente aplicable hoy a las monarquías parlamentarias que se mantienen en Occidente. La legitimidad histórica cada vez tiene menos importancia para la supervivencia de la institución, obligada a un ejercicio diario en busca del apoyo de l