El Hospital Gregorio Marañon alerta a los padres ante el creciente aumento de trastornos de salud mental infantil
El Hospital General Universitario Gregorio Marañón ha detectado en los últimos meses un creciente aumento de trastornos de salud mental en niños y adolescentes de 10 a 18 años, por lo que ha advertido a los padres sobre este asunto.
En especial, el hospital ha señalado que ha comprobado cómo ha aumentado los ingresos por ideación suicida y por trastornos de la alimentación, fundamentalmente anorexia nerviosa. Los expertos han detallado que una de las causas de este crecimiento se debe al confinamiento y a las restricciones por la pandemia.
“Ha coincidido en el tiempo que es cuando comienzan a tomar decisiones, a sentirse autónomos, proyectarse en el futuro, depender de las relaciones sociales para su desarrollo, etc. Además, se tiende a pensar en estas edades que mucho de lo que sucede es irreversible en el tiempo”, ha indicado el director del Instituto de Psiquiatría y Salud Mental del Hospital Gregorio Marañón, Celso Arango.
Así pues, el director ha insistido en que esta situación ha supuesto una enorme cicatriz en esta población que ha visto restringida su capacidad de decidir sobre su futuro, por lo que un número creciente de menores han sentido desesperanza.
“Tienen dificultad para encontrar sentido a su vida, verbalizan ideas de muerte, se vuelven más inseguros, tristes, ansiosos, impulsivos, se autolesionan o dejan de comer porque es la única forma en la que sienten que tienen control sobre su cuerpo”, ha sostenido.
Ante esta situación, los expertos han aconsejado a los padres fomentar la comunicación porque está demostrado que protege frente a enfermedades mentales en menores. “La detección temprana y la prevención son muy importante. Por eso, de cara al comienzo del curso escolar hay que fomentar la relación y comunicación. Es clave hacer actividades en familia y que se sientan apoyados”, ha asegurado la psiquiatra de la Unidad de Ingreso de Adolescentes del Instituto de Psiquiatría y Salud Mental del Marañón, María Dolores Picouto.
En este sentido, también ha recomendado cuidar las horas de sueño, la alimentación y realizar deportes por sus beneficios físicos, además de aumentar la autoestima y regular emociones negativas como la ansiedad o tristeza.
Por otro lado, los expertos han precisado que es importante educar a los niños y adolescentes en el uso responsable y seguro de internet, las redes sociales y los videojuegos. En caso de tener un impacto negativo con las nuevas tecnologías, los médicos prevén problemas mentales asociados a un uso inadecuado de estas.
“Si perciben que sus hijos sufren cambios de comportamiento, una mayor irritabilidad, tristeza, susceptibilidad, aislamiento, alteraciones del sueño y de la alimentación, entre otros, que estén muy pendientes y que pidan cita con su pediatra o médico de atención primaria para que, si lo estima oportuno, les pueda derivar a atención especializada y que la situación no se cronifique en el tiempo”, ha aconsejado Arango.
La segunda causa de muerte en población infantojuvenil es el suicidio, por detrás de los accidentes. “Es preciso que los familiares están atentos a estas señales, ya que los menores pueden ser tratados y fruto del tratamiento y de su mejoría desaparecerá lo que los médicos denominan ideación suicida. El suicidio se puede prevenir”, ha aseverado.
Como medida de prevención, el Hospital Gregorio Marañón ha puesto en marcha, de forma pionera en España, la figura de la enfermera especialista en salud mental en el Servicio de Urgencias Pediátricas, como Julio González que cada día atiende a los pacientes y a sus familias.
“Cuando los menores llegan a urgencias lo más importante es crear un espacio de seguridad y realizar un abordaje integral e integrado del paciente y la familia. Quitamos el estigma de la salud mental y empezamos a trabajar desde el minuto uno en un programa de alternativas”, ha desvelado.