Portugal vuelve a imponer restricciones al aumentar las hospitalizaciones y los ingresos en UCIs por Covid-19

Portugal asiste a un aumento del número de pacientes ingresados en planta y en cuidados intensivos por la pandemia de coronavirus, aunque este domingo no registró fallecidos a consecuencia de la enfermedad en un día en el que fueron notificados 2.041 contagiados.

En las principales ciudades de Portugal, como Lisboa, Oporto, Braga o Faro, se han retomado restricciones a la movilidad y sus habitantes tendrán prohibido circular por la calle entre las 23.00 y las 05.00 horas, en un toque de queda aplicado por el Gobierno en 45 de las 278 comarcas del país para frenar el avance de un virus dominado por la variante Delta de covid.

Según el último boletín de la Dirección General de Salud (DGS) de Portugal, ya hay ingresadas 567 personas por Covid-19 en los hospitales (24 más que en la última jornada), de las que 128 permanecen en cuidados intensivos (6 más).

Lisboa sigue siendo, al igual que en los dos últimos meses, el principal foco nacional de expansión del virus y en el día de hoy acumula el 47% de los nuevos contagios, seguida del norte del país, con el 27,6%.

Además, del toque de queda sigue vigente la medida adoptada hace tres semanas por el Gobierno que prohíbe la entrada y salida de personas en el Área Metropolitana de Lisboa, de las 15,30 horas GMT del viernes a las 05 horas locales del lunes.

Portugal ha entrado así en su cuarta ola, con la variante Delta como predominante, por lo que ha dado un paso atrás en la fase de desescalada.

En los 45 concejos de mayor incidencia, el teletrabajo vuelve a ser obligatorio y los espectáculos culturales cerrarán a las 22.30 horas.

Las cafeterías y restaurantes tienen que cerrar a las 22.30 horas, aunque en los 19 concejos de riesgo muy elevado por superar la incidencia de los 250 casos (entre los que figura Lisboa) el cierre es a las 15.30 horas los fines de semana y festivos.